Redes Sociales: Estrategia para bodegas
Redes Sociales:
Estrategia comunicacional para bodegas
Con la pandemia, las oportunidades para que nuestras marcas entren en contacto con los consumidores se vieron restringidas. Lo digital afectó la forma en que llevamos todas nuestras relaciones, tanto personas como comerciales. En el 2020, seguramente nos vimos empujados a crear una cuenta para nuestra bodega o prestarle mayor atención a ella. Más allá de la tendencia, ¿te has preguntado realmente para qué? ¿Por qué tenemos que estar presentes en las redes y cuál es el beneficio para nuestro negocio?
Una historia que puede ser la historia de muchos
Llega el día en que creamos la cuenta de nuestra bodega… Probablemente para que otro no lo haga antes con nuestro nombre o aprovechando la tendencia digital. En fin, la cuenta está creada… ¿y ahora? Subimos fotos de algún evento, de los distintos vinos y viñedos. Pasan algunos años, tenemos 85 publicaciones, alcanzamos los 400 seguidores y finalmente nos convencemos que esto así no funciona.
Sabemos que hay cuentas de bodegas competidoras con decenas de miles de seguidores y cuentas de influencers con varios millones. ¿Qué sabrán ellos que nosotros no? ¿Nos estaremos perdiendo de algo? Guardamos el tema en el cajón, porque cuanto más averiguamos, más las preguntas se multiplican. Evidentemente es un tema complejo y aprender a hacerlo bien lleva tiempo. Tal es así, que probablemente nos pase que cuando sintamos que empezamos a encontrarle la vuelta, descubramos que la red social apropiada ya no es Facebook, sino Instagram o Tik Tok.
A esta altura tenemos cuatro cosas bien claras:
1. Las redes tienen su propia lógica;
2. que esa lógica no es la nuestra;
3. las nuevas generaciones nos llevan una ventaja significativa;
4. y por más que se sigan multiplicando los cómos y los qués, aún no hemos encontrado un significativo ¿para qué?
¿Qué hace que las redes sociales valgan la pena?
¿Para qué? ¿Por qué? ¿Cómo podemos ganar dinero con esto? ¿Cómo podrían ayudarme a vender?
Increíblemente, en el mundo del vino sigue existiendo mucho escepticismo en relación a la importancia del marketing como herramienta comercial. En bodegas de mediana escala, no suele ser común encontrarnos con planes de marketing a largo plazo. Equipos capaces de traer evidencia que respalde el retorno de la inversión o indicadores potentes para monitorear el rendimiento (KPI´s). El marketing bien estructurado, puede llegar a ser más efectivo que la fuerza comercial. Pero por alguna razón, sigue sin convencernos. Entonces, ¿cómo podría hacerlo su hermana menor?: la comunicación digital.
Llegamos al punto en que nuestras redes las maneja algún familiar más joven o un colaborador con algo de tiempo libre. Ellos viven conectados a su smartphone y sin duda saben cosas que nosotros no… Y lo cierto es que si a esta altura tampoco hemos hecho grandes avances: ¿por qué no?
Todo parece fluir muy bien, pero después de un tiempo se vuelve a instalar la sospecha de que hay algo que nos estamos perdiendo. Y la pregunta existencial: ¿para qué?, sigue sin encontrar respuesta.
Después llega el COVID: El mundo se vuelve digital
Quienes tenían una estrategia sólida, aprovechan al máximo el contexto y logran gran crecimiento en ventas. Mientras tanto, en la vereda contraria, estamos quienes lamentamos no haber invertido en una estrategia digital bien aterrizada.
En fin, si oportunamente nos hubiéramos acercado a los especialistas y en conjunto definido un par de objetivos, hoy no estaríamos corriendo detrás del oasis de la salvación digital. Lo digital era una realidad hace un año y la pandemia no ha hecho otra cosa más que acelerar fuertemente esa tendencia.
Todavía estamos a tiempo de encarar el proceso exitosamente y el primer paso es la definición de una estrategia. Toda estrategia empieza respondiendo 4 preguntas fundamentales:
1. ¿Qué comunicar?
Quiénes somos. Exhibir nuestras credenciales marcarias. ¿Qué tiene nuestra bodega que la diferencia de otras? ¿Qué la hace especial? ¿Cuáles son los mensajes claves? ¿Qué quiere saber mi público sobre nuestra marca?
2. ¿Para qué comunicar?
Para estar presentes en la agenda comunicacional de nuestro target. Es clave generar suficientes razones para que el consumidor crea en nuestra marca. Para estar mentalmente disponible (para el consumidor) cuando surja la oportunidad de compra.
3. ¿Cuándo comunicar?
El momento es hoy, pero la frecuencia en que lo hagamos es aún más importante. De nada sirve postear una vez y no volver a hacerlo por tres semanas. Necesitamos mantener activa a nuestra audiencia y estar presentes en su memoria.
4. ¿Cómo comunicar?
Creando contenidos originales que sean relevantes y atractivos para promover la interacción. Todo lo que decidamos comunicar debe estar en línea con los intereses de nuestro público. Se acabó la época donde éramos rehenes de un contenido publicitario que no era de nuestro interés.
Tener en cuenta el qué, para qué, cuándo y cómo de tu estrategia comunicacional es ineludible a esta altura. No solo se trata de tener un lindo Feed; es esencial:
a) Planificar
b) Conocer los territorios de nuestra marca
c) Tener un buen contenido
d) Considerar la frecuencia de nuestras publicaciones
e) Definir la línea estética en que se presenta nuestra marca
Finalmente, debemos monitorear muy de cerca la retroalimentación que nos regala nuestra audiencia: likes, comments y shares. Dichos intercambios determinan el verdadero éxito o fracaso de nuestra estrategia. Permitiéndonos re-calcular y encaminar el rumbo.
Como sommeliers, entendemos que el mundo del vino tiene muchas particularidades, lenguajes y códigos que no todos manejan. A diferencia de otras agencias de RRSS, sabemos cómo comunicar y llegar con mensajes acordes a esta tribu tan particular que es la del vino.
Contáctanos y juntos planearemos la mejor estrategia digital para tu bodega.